Perforar pozos ilegales.
¿Qué hace un huachicolero y pillo de siete suelas metido en eso, haciéndose pasar por defensor del agua? Yo misma denuncié que el pozo de agua potable del ejido Constitución, en Buenaventura, se secó en perjuicio de 5 mil personas porque LeBarón abrió pozos sin permiso de Conagua para regar su huerta nogalera.

Provocó que se secaran cinco pozos de la comunidad agrícola; uno de ellos era el que abastecía de agua al pueblo.

Y lo dije entonces y lo digo ahora:
¿LeBarón en defensa del agua?

Por favor. El chiste se cuenta solo.
Es como si en una reunión de judíos que denuncian el exterminio nazi llegara Hitler a darles solidaridad.

Y justo ayer, después de una larga plática con mi amiga, la maestra Laura Araceli Chávez, Araceli de Jiménez, el tema nos llevó al agua. Ella me contó que en su comunidad las mujeres se levantan a las 3 de la mañana a llenar tambos porque el agua se corta a las 6 de la mañana, y si no alcanzan, ya no hay.

Entonces pensé:
¿Sabrá la obrera de maquila, el taxista, el conserje de una escuela o la estudiante de la normal de qué se trata esta nueva ley?

¿O tal vez pensarán que esto solo tiene que ver con la gente que tiene un pozo y que ahora inventan que “el gobierno se los va a quitar”?
Pero esto tiene que ver con la vida concreta de las personas, sobre todo con las mujeres de carne y hueso, las que hacen los trabajos domésticos invisibles donde el agua es vital: para limpiar, preparar alimentos, lavar y hasta bañar a los chamacos.

Con esto en mente le pedí a mi primo Martin Solís Bustamante , sí ese mero, el líder del Barzón que panistas y priistas lo golpearon e insultaron en el Congreso de Chihuahua, cuando intentó explicar los beneficios de la nueva ley del agua. Martín es uno de los que más conocen del tema del agua en el país.

Y esto fue lo que me dijo Martín: Que la Ley de Aguas Nacionales tiene 33 años, creada en tiempos de Salinas, y que ha permitido la perforación de pozos sin concesión y la sobreexplotación de acuíferos.

Que en Chihuahua cada año se extraen 3,000 millones de metros cúbicos del subsuelo, lo que equivale a llenar La Boquilla y Las Vírgenes juntas.
–Que los cuatro acuíferos que abastecen a la capital están sobreexplotados desde hace años.

Y los ejemplos que me dio son para encabronarse:
La cervecería Heineken, en Meoqui, usa el agua concesionada a la Junta Municipal. La cervecera no tiene concesión propia, pero utiliza el agua que debería ser para consumo humano para producir cerveza.

La minera Peñasquito, en el semidesierto zacatecano, usa prácticamente toda el agua del subsuelo para la minería, mientras a los pobladores les llevan agua en pipas.

En Chihuahua capital, miles de familias tampoco tienen agua en sus casas y dependen de pipas. Pero mientras tanto, los grandes nogaleros sobreexplotan los acuíferos en El Sauz y Sacramento como si fueran inagotables.

Y entonces queda claro por qué algunos no quieren la nueva ley:
Porque no quieren una ley que ponga orden en los pozos ilegales, que controle la sobreexplotación, que priorice el agua para consumo humano y que garantice que todas las familias tengan agua en sus casas.

Si todo sigue igual, los privilegios siguen igual.
Y el problema es que mientras algunos llenan nogaleras, minas o fábricas, 100 mil chihuahuenses nunca han tenido agua en sus hogares.
Por eso urge una nueva ley del agua:

Para que el agua vuelva a ser un derecho y no un negocio.
#elaguaesvida

#ElAguaEsDelPueblo
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#aguapotable
#derechoshumanosparatodos
Cd. Delicias, Chih., 26 de noviembre de 2025.