&.- Una agente de Vialidad valerosamente se metió entre los rijosos para separarlos ya que estaban a punto de liarse a golpes tres jóvenes contra uno
Manuel GARCIA DAVILA
A escasos metros de donde se llevaba a cabo la ceremonia de la fundación de Delicias, se suscitó un conato de pleito que estuvo a punto de llegar a los golpes, al grado de que primero debió de intervenir un agente de Vialidad y posteriormente media docena de policías, unos en patrullas y otros en motocicleta.
Aproximadamente a las doce de mediodía, un vendedor foráneo de perfumes recorría la calle primera entre la sexta y quinta avenidas ofreciendo sus productos, al llegar a un expendio de cerveza que se ubica en ese lugar, al parecer les ofreció a los que estaban dentro sus perfumes, a lo que contestaron presuntamente con groserías.
El vendedor foráneo contestó a la agresión verbal y a pocos metros del negocio, tres jóvenes lo alcanzaron con la finalidad de golpearlo, n sin antes una serie de gritos y amagos de violencia.
Eran tres sujetos contra el comerciante foráneo, joven también y que se veía con ganas de responder en caso de que lo agredieran físicamente.
Decía a los agentes policiacos que por eso no quería venir a Delicias a vender, porque era una plaza difícil y de pocas ventas y ahora menos le van a quedar ganas de regresar
Los gritos llegaron hasta una agente de vialidad que estaba en el desfogue vehicular y de inmediato intervino, situándose entre los agresores y el vendedor de perfumes, pero de poco sirvió porque los ánimos estaban caldeados y continuaron los amagos de liarse a golpes.
Hubo la necesidad de que llegaran más agentes de la policía municipal, unos en moto y otros más en vehículo oficial para controlar el asunto, mediando entre ambas partes, pero no se ponían de acuerdo y podría llegarse hasta la detención de los cuatro rijosos.
Al final todo quedo solamente en gritos ya que los elementos policiales señalaron que al no haber violencia física, era posible el no llevar a cabo detenciones, por lo que luego de dialogar, el vendedor ambúlate siguió su camino y los del expendio a su negocio.
Un hecho que llamó la atención de los transeúntes debido a la gran presencia policial en este conflicto, además de que se destaca de la valerosa intervención de la agente de vialidad que se metió ante los rijosos que de no ser por la oficial, se hubieran liado a golpes y eso al parecer no le importó a la servidora pública de salir golpeada pero que impidió un enfrentamiento violento entre tres contra uno.